Ama de casa con título de FP

Preparar la comida y cuidar de hijos o ancianos convalidará asignaturas para lograr un título

21.01.09 - Diaro Vasco

La vida no da títulos, pero enseña más que muchas escuelas y universidades. El Ministerio de Educación quiere abrir una vía para que ese 'aprendizaje' facilite la obtención de un título académico. Ofrece la posibilidad de que las amas de casa mayores de 25 años sin experiencia laboral pero que han sabido cuidar, educar y alimentar a sus hijos, a sus mayores y a personas discapacitadas, vuelvan a los estudios. Que rentabilicen una valiosa experiencia vital que será tenida en cuenta cuando quieran obtener un grado medio de Formación Profesional en Hostelería o Educación Infantil. Titulaciones a las que podrán optar hasta dos millones de personas.
Educación quiere dar una «segunda oportunidad» a quienes abandonaron el sistema educativo o ni siquiera se incorporaron a él. El próximo mes aprobará un Real Decreto de Acreditación que permitirá traducir su formación extra académica en 'convalidaciones'. Será mediante una prueba de evaluación y cursos específicos.
La titular del Departamento de Educación, Política Social y Deporte, Mercedes Cabrera, espera que esta vía de retorno al sistema educativo abra nuevas oportunidades. En especial a las mujeres, a esas amas de casa que podrían optar a capacitarse en profesiones relacionadas con los campos de la dependencia, la educación infantil y de la hostelería.

Visita al Parlamento de Andalucia

Alumn@s de primero y profesoras en la visita al Parlamento de Andalucia. Impresiona verlos desde la tribuna!

Ni insulina, ni heparina

Ojo con las inyecciones de insulina. El Tribunal Supremo deja claro que no es función de los auxiliares

El Supremo no permite a los cuidadores poner insulina a los ancianos
Madrid - 03/01/2009
El Tribunal Supremo (TS) ha fallado que la administración de insulinas y heparinas no entra dentro de las funciones de los auxiliares de geriatría que, ante esta clase de tareas, sólo deben colaborar con los profesionales competentes. La sentencia, dictada por la Sala de lo Social ante un recurso interpuesto por UGT, anula otra de la Audiencia Nacional según la cual, "en ausencia" del enfermero, un gerocultor puede administrar estas sustancias por vía subcutánea a los residentes de un centro de ancianos "siempre que la dosis y seguimiento" esté revisado por médicos.
El fallo del Supremo anula así la decisión de la Comisión Paritaria encargada de elaborar el IV Convenio Marco Estatal de Servicios de Atención a las Personas Dependientes.
Entre las funciones de un gerocultor están las de ayudar en la higiene personal del anciano o dependiente, darle de comer cuando sea preciso o comunicar las incidencias que se produzcan sobre la salud de los ancianos. Pero tras la sentencia del Supremo, se les excluye de administrar estos medicamentos, aunque en muchos casos los cuidadores familiares o el propio paciente se han encargado de ello. El Supremo entiende que inyectar estas sustancias "comporta una acción invasiva, aunque mínima" y por tanto es una práctica médica, no del auxiliar de geriatría.